Como su nombre indica, esta ruta sigue la línea del litoral ribadense y permite conocer de cerca la sucesión de entrantes, salientes, playas recogidas, ensenadas rocosas y faros. La ruta la empezamos en As Catedrais, las catedrales, y terminamos en el bonito y pequeño pueblo de Rinlo.
Esta empieza en la playa de las catedrales. La playa se ve en todo su esplendor con la marea baja. Con las aguas retiradas se puede pasear por la arena y observar las diferentes formas que toman los acantilados. Eso sí, la playa parece una romería. Creo que esta playa debe ser impresionante en una noche de luna llena. A continuación vienen unas cuantas fotos.
Después de un rato decidimos continuar con la ruta. A partir de este punto vamos descubriendo diferentes playas. Todas destacan por sus pequeños acantilados y por las formas que toman los mismos. Algunas se encuentran conectadas por un pequeño pasillo de arena cuando la mar se retira. Estas son muchos más tranquilas que la de las catedrales por lo que el paseo por las mismas es mucho más relajante
Praia de O Castros es la primera playa en la que paramos. Esta se encuentra unida a la praia de As Islas por una pequeña lengua de arena con la marea baja.
De esta manera se van sucediendo playa tras playa hasta llegar al Faro de Illa Pancha. Ambos faros se encuentran enclavados en la isla que le da nombre, justo en la entrada de la ría de Ribadeo.
Nada más entrar en el pueblo nos damos cuenta que el plato favorito es Arroz con lumbrigante (bogavante) así que decidimos que había llegado el día de probar este exquisito plato. Después de dar una vuelta por el pueblo nos decantamos por el restaurante Porto de Rinlo. La decisión fue todo un acierto.
Después de degustar este exquisito plato abandonamos la costa gallega y nos dirigimos al principado de Asturias, pero de eso ya hablaremos otro día.
Praia de O Castros es la primera playa en la que paramos. Esta se encuentra unida a la praia de As Islas por una pequeña lengua de arena con la marea baja.
De esta manera se van sucediendo playa tras playa hasta llegar al Faro de Illa Pancha. Ambos faros se encuentran enclavados en la isla que le da nombre, justo en la entrada de la ría de Ribadeo.
Una vez dejado atrás los faros de Illa Pancha llegamos a la pequeña villa de Rinlo. Esta villa pesquera tiene sus orígenes en la pesca ballenera y hoy en día tiene fama por tener los mejores percebes, langostas, lubrigantes y centollos de toda la costa Cantábrica. Estos crustáceos crecen a sus anchas en las numerosos cuevas de los acantilados sobre los que las olas baten con fiereza.
Nada más entrar en el pueblo nos damos cuenta que el plato favorito es Arroz con lumbrigante (bogavante) así que decidimos que había llegado el día de probar este exquisito plato. Después de dar una vuelta por el pueblo nos decantamos por el restaurante Porto de Rinlo. La decisión fue todo un acierto.
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